- Demi Lovato confesó recientemente que había superado un infarto y tres derrames cerebrales con sólo 28 años
- La cantante ahora está feliz en su cuerpo tras mucho luchar contra él
La vida de Demi Lovato podría equivaler perfectamente a 3 vidas normales, y eso que sólo tiene 28 años. La cantante y actriz ha vuelto a nacer después de superar sus problemas con el alcohol, las drogas y la comida, y es que todo eso junto le ha llegado a provocar secuelas que arrastrará durante mucho tiempo. A punto de estrenarse su documental ('Dancing with the devil', 'Bailando con con el diablo' en español), el 23 de marzo en YouTube, Demi es una persona nueva, y lo ha demostrado con un sencillo vídeo en el que ha compartido su radical pérdida de peso.
A través de Instagram, Demi ha contado que ha dejado atrás unos kilitos de más, unos kilos que significaban el orgullo de haber superado su bulimia, pero ahora que está sana por dentro y por fuera, ha decidido perderlos. ¿Cómo? "Accidentalmente", según ha dicho.
"Ya no cuento las calorías. Ya no me sobreejercito más. Ya no restrinjo (comidas) o detoxifico, y ya no vivo mi vida en la cultura de la dieta... y aún así he perdido peso. Es una experiencia diferente, y esto llena, no de comida, sino de sabiduría divina y guía cósmica, paz serenidad, alegría y amor", ha escrito mientras se muestra dentro de un pantalón antiguo varias tallas más grande.
Este vídeo, sin embargo, es mucho más que mostrar que ha perdido peso y ya está. Es una forma de demostrar que va por el buen camino para superar su trastorno alimenticio, que está comiendo bien y que está feliz en cualquier talla, algo que todos deberíamos aplicarnos: hace tan sólo unos meses se mostraba muy contenta con todos y cada uno de sus kilos, porque le habían traído el pecho que ella siempre había querido (dijo que antes se avergonzaba de lo pequeño que era), pero ahora sabe que eso es secundario, y que le llena mucho más el hecho de estar contenta y en paz consigo misma. ¡Bravo por ella!