La casa familiar, en el punto de mira
El reparto se complica, según Vanitatis, con el chalet familiar de Madrid, llamado ‘El Cantábrico’.
Hace más de tres años la pareja firmó ante notario un acuerdo de separación acordando cómo repartirían lo poco que tenían en común, básicamente lo que se refería a su hija y el chalet de Villafranca del Castillo (Madrid), valorado en 1,5 millones.
El 80% de la propiedad y el usufructo pertenecen a Bustamante y el 20%, a Paula.
Además, sobre la casa pesaría un embargo por valor de 720.000 euros.