Una María José renovada
Ha pasado dos meses ingresada en el hospital psiquiátrico clínica El Serranil, en Málaga. Dos meses en los que María José Campanario lo ha pasado fatal, aquejada de una dolorosísima fibromialgia que derivó en una mala alimentación y problemas en el sueño. Pero, por fin, la esposa de Jesulín, parece que ve la luz al final del túnel.
Tanto es así que hace unos días recibió, por fin, el alta hospitalaria y así pudo acompañar a su marido a una corrida en Navarra. La odontóloga llegó al pueblo de Peralta el domingo 3 de septiembre, por la noche, después de nueve horas de viaje en coche. Y allí se recluyó en el hostal donde se hospedaba Jesulín.
Nadie supo de su presencia hasta que al día siguiente y, tras la corrida de su esposo, salió junto al torero para marcharse a casa. Fue en ese momento cuando pudimos comprobar que María José vuelve a ser ella. Completamente renovada, por dentro y por fuera, con mejor aspecto, más delgada, serena y ¡castaña!