La expulsión de un reality se puede tomar de dos maneras: fatal, porque te quedas sin trabajo y te puede parecer hasta injusto que se quede un compañero al que no aguantas antes que tú, o con deportividad, aceptando la derrota y ya. Sin embargo, parece que hay una tercera que hemos descubierto con Bea Retamal, y es con saltos de alegría y alborozo. Nunca antes una despedida fue tan feliz, pero es que la valenciana, a pesar de llevar sólo dos semanas de concurso, ¡estaba deseando irse a su casa con su familia, su chico, su perra y sus amigos!
¿El motivo? Bea quiere ver de una vez a su madre, y no precisamente porque la eche de menos a ella (que también), sino porque ya la ha avisado, nada más enterarse de que estaba expulsada, de lo primero que quiere hacer nada más llegar a España: ¡comer chocolate y hamburguesas! "Estoy súper contenta. ¡Mamá, por favor, mucho, muchísimo chocolate! ¡¡Y una hamburguesa!!", gritaba llena de emoción, aunque también esperaba que la organización del programa le diera una bien grande en cuanto llegara al hotel.
Su vuelta a España, sin embargo, no tiene pinta de que vaya a ser por mucho tiempo: Bea confesó que lo único de lo que se arrepentía era de no haber sido capaz de meter la cabeza bajo el agua ni para pescar, pero en cuanto Yiya le dijo que si quería se la metía ella antes de que se fuera, Bea reveló: "No, no, da igual. Ya me iré a otra playa. Me iré a Cuba dentro de poco". Precisamente Cuba es uno de sus países favoritos: ya se fue en 2018 con Rodri cuando estaban juntos, y un tiempo después volvió sola. ¿Regresará ahora con su novio Adrián?