El flotador, su gran enemigo
“Todo esto (se señaló la mitad inferior de la cara), quitando los ojos, es de la familia de mi padre. Y lo de la tripa y coger grasa de aquí, claro”, dijo con rintintín agarrándose la zona del flotador. “lo demás, todo lo que queda, es Flores”, sentenció. Vamos, que todo lo bueno ¡es herencia de los genes de su madre!